Volver a ser niña, jugar con los cuentos, dislocarlos.Contar otro tipo de Caperucita, encontrarse con un Peter Pan diferente, dejar que la Sirenita se exprese y que el flautista visite Instagramelin.
Los cuentos clásicos nos han acompañado desde la infancia. Sus mensajes y moralejas todavía pueden servirnos pero necesitan otros símbolos. Ahora nos movemos más con # y @. Situar a los personajes en el aquí y en el ahora a ver qué hacen.